Estudios recientes han confirmado que la intimidad sexual y el amor están estrechamente relacionados. Científicos canadienses han llegado a la conclusión de que la pasión que surge en el momento del contacto íntimo, tiene un papel importante en el fortalecimiento de los sentimientos románticos. Según ellos, una noche apasionada puede ser la base de un matrimonio largo y feliz.

Las investigaciones demuestran que las mismas zonas del cerebro responsables de las expresiones de amor se activan durante la actividad sexual. Este descubrimiento explica por qué la intimidad sexual puede dar lugar a sentimientos profundos entre la pareja. Los científicos afirman que el deseo sexual puede transformarse en verdadero amor, sobre todo si la intimidad contribuye a una relación armoniosa.

Para un hombre que satisface a su pareja en la cama, la probabilidad de convertirse en objeto de verdadero afecto para ella aumenta significativamente. Este descubrimiento es interesante porque pone de relieve el papel de la intimidad en el desarrollo de relaciones duraderas. Aunque al principio las personas pueden entablar relaciones puramente por placer, con el tiempo estas conexiones suelen convertirse en algo más, llegando a ser la base del amor y la fidelidad.

Cuando la intimidad se vuelve regular y mutuamente satisfactoria, la pareja empieza a sentir una mayor cercanía y apego emocional. Esto conduce a una conexión más profunda y a un aumento de los sentimientos mutuos que puede durar muchos años.

Basándose en estos hallazgos, puede afirmarse que el sexo casual bien puede convertirse en una relación llena de amor y cuidado mutuo. Cuando las personas inician su andadura en la intimidad, no siempre suponen que vaya a conducir a algo más. Sin embargo, la realidad es que la intimidad sexual puede ser la chispa que prenda en un sentimiento real, duradero y fuerte.

Así pues, la intimidad desempeña un papel clave en la formación de una relación, y a menudo es el momento en que la pasión se convierte en amor, y el sexo ocasional, en un apego profundo y fuerte.