La comunicación es una parte importante de cualquier relación, pero algunos temas pueden hacer que un hombre se sienta irritado, ofendido o incluso quiera terminar el contacto. ¿Qué preguntas es mejor evitar para evitar conflictos?

Uno de los temas más dolorosos para un hombre son las críticas a sus aficiones. Incluso si piensas que su interés por el fútbol, ​​la pesca o los videojuegos es una pérdida de tiempo, no hables de ello con desdén. Esta actitud puede provocar agresión o distanciamiento, porque un hobby para un hombre no es sólo entretenimiento, sino una forma de relajarse y sentirse seguro.

No es menos desagradable para un hombre escuchar a una mujer quejándose constantemente de su apariencia. Si una chica dice regularmente que se ve mal, que está muy gorda o que es fea, un hombre puede empezar involuntariamente a estar de acuerdo con ello. Las conversaciones frecuentes sobre este tema no provocan el deseo de hacer un cumplido, sino que, por el contrario, pueden hacerle pensar si su elegida es realmente atractiva.

Los celos irracionales también pueden destruir relaciones. Los hombres afirman que pueden comunicarse con mujeres sin connotaciones románticas o sexuales. Pero si la elegida hace escenas de celos por una mirada casual a una camarera o un saludo de un vecino, un hombre puede comenzar a mirar a otras mujeres con interés.

Otro tema peligroso es hablar de relaciones pasadas. A los hombres no les gusta que los comparen con su pareja anterior, incluso si la comparación es a su favor. Mencionar constantemente que tu ex te trajo flores, te preparó café o se comportó de alguna otra manera puede ser irritante y hacerte sentir que él o ella todavía tiene un lugar en tu vida.

Las críticas de los amigos de un hombre rara vez conducen a resultados positivos. Muchas personas han sido amigos desde la infancia, y si comienzas a hacer comentarios negativos sobre sus amigos, puedes obligar a un hombre a elegir entre tú y ellos. En la mayoría de los casos, esta situación no termina a favor de la relación.

Así, respetar los intereses y el espacio personal del hombre ayuda a fortalecer el vínculo y evitar conflictos innecesarios. Es mucho más importante apoyarnos unos a otros que intentar cambiar o criticar.