Los cabellos propensos a la grasa requieren atención y cuidados especiales. Lávalos sólo una vez cada 4-5 días, utilizando agua a temperatura ambiente. Para el aclarado puedes utilizar kvas diluidas en agua, o infusiones de hierbas como madre y madrastra, ortiga, llantén o hierba de San Juan. Estas plantas ayudan a combatir el cabello graso y mejoran el estado del cuero cabelludo.
Antes de lavarse el pelo, es útil lubricar el cuero cabelludo con kéfir o leche agria y dejarlo actuar entre 15 y 20 minutos. También es eficaz lavarse el pelo con mostaza seca diluida en agua.
El zumo de cebolla con aceite de ricino es otra forma de combatir el pelo graso. Esta mezcla debe frotarse en las raíces del pelo, dejarse durante 30-40 minutos y luego lavarse.
Para regular la grasa del cuero cabelludo, se puede utilizar zumo de zanahoria, frotándolo un par de horas antes de lavarlo.
La tintura de cebolla puede prepararse vertiendo cebolla con vodka e insistiendo durante 2 semanas. Esta infusión se utiliza para frotar en el cuero cabelludo, y el olor de la cebolla se elimina al lavar el cabello con mostaza.
La decocción de corteza de roble ayuda a que el pelo sea menos graso. Para ello, se hierve la corteza de roble, se cuela y se utiliza para lavar el cabello.
El cuero cabelludo graso es útil limpiarlo con tintura de caléndula o infusión de serrín común.
El uso de una solución al 5% de ácido bórico con zumo de limón y alcohol ayuda a reducir la secreción grasa del cuero cabelludo.
Es importante recordar que para lograr resultados es necesario seguir el método de cuidado elegido con regularidad y durante varias semanas.