Está decidido: vamos a cambiar el color del pelo. Es importante tener en cuenta todos los matices para que el resultado traiga alegría, no decepción. El primer paso, y el más importante, es elegir el color adecuado. Define la imagen, dando frescura al rostro o, por el contrario, privándolo de su naturalidad. Elegir un color no es sólo imitar a las famosas, sino tener en cuenta las características individuales: tipo de piel, color de ojos y rasgos faciales.
tipos de aspecto y color de pelo
Las personas pueden dividirse en tipos de apariencia cálida y fría. El tipo de piel cálida tiene tonos dorados, melocotón o cálidos. Pueden elegir con seguridad colores de pelo castaños, pelirrojos o dorados. El tipo de apariencia fría se caracteriza por una piel clara o rosácea y ojos azules, grises o celestes. Les convienen los tonos ceniza, rubios o negros.
selección del color
Tras determinar el tipo de piel y el color de ojos, hay que elegir el tono de pintura adecuado. Este es el punto clave que determina el resultado final. Los estilistas profesionales utilizan el círculo cromático para seleccionar el color, teniendo en cuenta el tono del cabello y el resultado deseado.
tonos indeseables
Algunos colores, como la berenjena o la zanahoria, pueden no sentar bien a todo el mundo. A menudo dan la impresión de envejecer. También hay que tener cuidado con los tonos ceniza, que requieren una piel y un maquillaje perfectos.
antes de la coloración
Antes de colorear, es importante prepararse. Antes de elegir un color, es mejor ponerse en contacto con un profesional que le ayude a determinar el tono adecuado y evitar sorpresas desagradables.
conclusión
Elegir un color de pelo es un paso importante que debe hacerse conscientemente. El tono adecuado puede hacer que la imagen sea más brillante y fresca, y el equivocado puede estropear el aspecto y el estado de ánimo.