La depresión posparto es un verdadero reto para muchas madres primerizas. ¿Cómo evitarla y disfrutar plenamente de la nueva maternidad? Investigadores de la Universidad de Toronto (Canadá) han dado respuesta a estas preguntas al revelar que las mujeres que viven en grandes ciudades son más propensas a sufrir depresión posparto en comparación con sus homólogas de pueblos y ciudades más pequeños.
El estudio, en el que participaron 6.000 mujeres, reveló que una de cada 10 mujeres urbanas sufre depresión posparto, mientras que este problema sólo afecta al 6% de las que viven en zonas rurales.
Quizá la mejor solución para las nuevas mamás sería trasladarse a zonas suburbanas, donde el aire es fresco, la naturaleza es hermosa y los factores de estrés son mucho menores.
Sin embargo, lo principal es darse cuenta de que la depresión posparto es una enfermedad real que requiere tratamiento. Si un cambio de aires no ayuda, ponte en contacto con un especialista que te ayude a sobrellevar este trastorno. Los psicólogos también aconsejan a las mamás que sufren depresión posparto que pasen más tiempo comunicándose (al menos por teléfono), expresen sus sentimientos, pasen más tiempo al aire libre, acudan a un masajista en casa y hagan yoga.
La depresión posparto puede aparecer de forma diferente en cada mujer, ya sea inmediatamente después del parto o unos meses más tarde. Es importante que el cónyuge y los seres queridos sirvan de apoyo a la joven madre y la ayuden a no sumirse sola en la situación, sino a superar juntos las dificultades.